¿Muerte o regreso a casa?, nuevo artículo de Gloria Pérez

 

Mi regreso a casa libro de la escritora Gloria Pérez

Muerte o regreso a casa: ¿Te lo has preguntado alguna vez? ¿Quién soy? ¿De dónde vengo? ¿Qué he venido a hacer aquí? ¿Y después de este viaje?

 

Otro significado de la muerte:

“Alcanzamos la meta suprema de la existencia humana cuando pasamos a estar en paz con nuestra propia inmortalidad y vemos la muerte no como un final o un castigo sino como un despertar, una recompensa, un regreso al infinito que rodea este paréntesis en la eternidad”

Una idea que llevas contigo durante toda la vida y desde tus primeros años es la conciencia de tu propia muerte. Una pregunta que parece tenernos a todos perplejos es: «¿A dónde iré cuando muera?». Muchos de nosotros tenemos una relación no resuelta con la muerte. Conocemos a personas que han muerto. Hemos visto a otros coquetear con la muerte. Sabemos que hemos de morir algún día. Pero no por ello deja de ser la muerte un misterio eterno. A fin de crear una vida de realidad mágica deberás liberarte del temor y la ansiedad que rodean este misterio de la desaparición del propio cuerpo.

Podemos enriquecernos con diferentes visiones sobre la muerte que nos han legado grandes buscadores de la verdad:

El Bhagavad Gita habla de esta vida con estas palabras:
Así como un hombre abandona las ropas gastadas y adquiere otras nuevas, cuando el cuerpo está gastado el Yo que vive en su interior adquiere otro nuevo.

El traductor Eknath Easwaran, que ha dedicado gran parte de su vida al estudio del Bhagavad Gita, dice a propósito de estas palabras:
Para un ser tan iluminado… la muerte no es más traumática que el hecho de desprenderse de una vieja chaqueta. La vida no puede ofrecer más alta realización. La meta suprema de la existencia humana ha sido alcanzada. El hombre o la mujer que se da, cuenta de que Dios lo tiene todo y no carece de nada: teniendo esto, no se desea más; ningún pesar, por gravoso que sea, puede, sacudir a este hombre. La vida no puede amenazar a una persona así y no lleva en sí más que la oportunidad de amar, de servir y de dar.

En la tradición cristiana, Jesucristo nos habla de la inmortalidad: « … y ésta es la vida eterna en la que tú conocerás en ti al único y verdadero Dios». Todas las tradiciones religiosas hablan de llegar a conocer la propia inmortalidad alcanzando una espiritualidad y un sentido del propósito. En todas las épocas del hombre, desde los comienzos de la historia escrita de todas las tradiciones religiosas humanas, ha habido creencias similares en torno a la inmortalidad. Todas ellas hablaban de la existencia de un mundo invisible que forma parte de la personalidad de cada ser humano y de que el propósito de la vida en el propio cuerpo físico es descubrir a Dios, u otro nombre que queramos darle y que represente la inteligencia invisible que impregna toda la vida.

Aunque es muy enriquecedor y reconfortante estas palabras de los grandes buscadores de la verdad, me inclino a invitaros a todos los seguidores de estas publicaciones a compartir vuestras experiencias personales ya que considero la mejor fuente de información la acompañada con el sentir de las personas que han tenido la oportunidad de compartir su propia experiencia, de esta manera nos enriqueceremos todos:

“La unión hace la fuerza, la cooperación nos lleva a la Unidad”
La razón básica de tu ansiedad en relación con la muerte es el hábito de toda una vida de creer que tu cuerpo eres tú. Cuando aprendas que eres en realidad una mente consciente que habita un cuerpo empezarás a ver lo absurdo de esa identificación total con tu cuerpo. Pronto desarrollarás en ti una actitud de interés afectuoso por tu cuerpo, acompañada de un sentido de identificación distante.
A medida que despiertes más y más desaparecerá tu preocupación por lo que pueda ocurrirle a tu cuerpo y sustituirás esta preocupación por el conocimiento. Tu meta será poner tu cuerpo y tu mente en equilibrio con las leyes universales de Dios, consciente del milagro que eres, y librarte de toda idea absurda en relación con la muerte. Descubrirás que aquellos que han muerto no han desaparecido en absoluto. Simplemente están renovándose, como has venido haciendo tú.

Gloria Pérez

Dedicado a mi amada amiga del alma Mª Carla Rouillón

 

 

Deja una respuesta

Esta web utiliza cookies propias y de terceros para su correcto funcionamiento y para fines analíticos y para mostrarte publicidad relacionada con sus preferencias en base a un perfil elaborado a partir de tus hábitos de navegación. Al hacer clic en el botón Aceptar, acepta el uso de estas tecnologías y el procesamiento de tus datos para estos propósitos. Ver Política de cookies
Privacidad